
Defendía de manera a apasionada y elocuentes, como única fórmula de ciudad sostenible la ciudad compacta y compleja, planteando ejemplos de proyectos urbanos sostenibles que se han convertido en modelos de referencia en la historia de la arquitectura contemporánea.

Su defensa del control del consumo energético y su claro convencimiento de que la sostenibilidad es el único camino marcaron el futuro de la arquitectura actual.

En los 60 se asocia a Norman Foster y sus mujeres Wendy Cheesman y Su Brumwell. Son el Team 4.

La hermana de Wendy (Georgie Chessman) les firma los proyectos porque, en un inicio, es la única con título.

En los trabajos del grupo ya se nota modernidad y, quizás, muestran lo que viene después.

En algunos proyectos de Team 4, la manera de mostrar cómo el edificio esta sin ocultación, es un anuncio del estilo high-tech del que Rogers y Foster serían estrellas.

Asociado a su mujer Su, sin los Fosters, diseñan la Zip-Up House para un concurso de DuPont sobre viviendas modernas.
El vinculo de Rogers con una arquitectura futurista es evidente.
La Zip-Up House no llega a construirse, pero Rogers aprovecha ideas para otros proyectos y muchas veces se señala que en esta vivienda modular se aprecian muchos de los elementos que van a ser su firma en grandes edificios.

A finales de los 60, Rogers, cuyo padre medico judío es segunda generación de ingleses en Italia y cuya madre es italiana, se asocia con el genovés Renzo Piano.

Juntos, a finales de los 60 le hacen unas oficinas a Universal Oil Products que recuerdan a la Zip-Up House.


Y también una sede a la joven compañía italiana del diseño B&B Italia.


Rogers y Piano cambian la historia de la arquitectura (y el diseño) con este edificio.
Y Esa misma disfruta de espacios super cool del diseño que siguen exactamente lo que Rogers y Piano hicieron aquí. El Centro Pompidou.

Un edificio construido con las tripas por fuera. Conductos, tuberías y desagües, pero también estructura y escaleras. Todo.

Y pintado de colores. Un museo perfecto y una máquina del tiempo que lanza a París al futuro.

La arquitectura high-tech se puso de moda.

Rogers siempre fue el más coherente de los arquitectos que construían en este estilo: cierta estética industrial, uso de prefabricados, componentes técnicos a la vista… Así construye el banco más espectacular de Londres.

Quizás lo interesante del Lloyd’s es que absorbe la tradición inglesa más de lo que parece.

Como en esa bóveda de cristal que no deja de ser una versión moderna del Crystal Palace de Hyde Park.

Se puede contemplar obras de Rogers por todo Londres.
Algunas de sus obras son tan conocidas como el O2 Arena, que ya es uno de los grandes iconos de la capital británica.


Pero sus proyectos también salen del país.

Desde el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo hasta la sede de Abengoa en Sevilla, la arquitectura de Rogers cruza el continente.
También ligó su nombre a la historia del Reino Unido construyendo el parlamento nacional de Gales (Senedd Cymru) en Cardiff.


Y llevó su estilo hipertecnológico y su visión práctica a la espectacular T4 de Barajas en colaboración con el Estudio Lamela.


Hace también las Bodegas Protos en Peñafiel, en Valladolid.

El País
El Barroquista, Twitter