

La Ciudad enchufable de Peter Cook, es una de las mejores cosas que sale de Archigram.


Es el sueño de una megalópolis futura donde el hedonismo convive felizmente con la tecnología ultramoderna.

A primera vista, la utopía urbana de Cook se parece mucho al Centro Pompidou de Renzo Piano y Richard Rogers (1977) o al diseño no construido de Norman Foster para un centro cívico y un intercambiador de transportes de Hammersmith, en el oeste de Londres (1979).

Esto no debería sorprender, ya que Rogers y Foster tienen influencia de Archigram y a Rogers, en particular le entusiasma la idea de una tecnología liberadora que ayudaría a la gente a disfrutar de los centros urbanos mas que a sentirse amenazada como en 1984 o en Metrópolis.

La ciudad enchufable esta coronada con grúas para mostrar que esta en un estado de flujo continuo.

Si alguien quiere mover su capsula para vivir, puede.

Las ideas arquitectónicas de Cook se basan en la premisa de gente pasándolo bien pero dentro de contexto de una arquitectura nueva y altamente sensible.

La ciudad enchufable es influyente, pero tendrá que permanecer en los planos hasta que se construyan ciudades en el espacio y tenga sentido una forma de construir comunidades hechas de piezas que encajan y son enchufables.

Después de Archigram, Cook diseña muchos proyectos de fantasía, pero muy pocos o ninguno tiene el impacto de la Ciudad Enchufable.
