

La Opera de la Bahía de Cardiff, no erigida erróneamente, es uno de los mejores proyectos no realizado en los 90.

Es una tragedia para Gales, un lugar que nunca se ha caracterizado por su buen gusto en arquitectura y que actúa con estrechez de miras respecto a este soberbio diseño.

La idea es que el nuevo palacio de la ópera actúe como un eje cultural de recuperación y urbanización de la Bahía de Cardiff, que forma la línea de la costa de esta ciudad del sur de Gales.

Se convoca un concurso internacional que atrae a lo mas granado de la arquitectura.


Lo gana Zaha Hadid (1951), una arquitecta nacida en Irak, que tiene el inconveniente de ser mujer e iraquí.

No hay que olvidar que dos años antes del concurso, Occidente lucha contra Sadam Hussein.
Es injustamente tratada por mezquinos intereses locales y tipos malhumorados de la Comisión del Milenio (un organismo publico creado para gastar el dinero de la lotería), `por lo que el proyecto se desvanece, pero no se olvida.

Zaha Hadid es una mezcla entre constructivistas rusos, deconstructivistas modernos y su propio y poderosos discurso de formas dinámicas y muy angulosas que más tarde le hace triunfar por todo el mundo.





1998 gana un concurso para diseñar un museo de arte contemporáneo en, Cincinnati, Ohio y puede por fin demostrar que su arquitectura es increíble y devuelve la vida a la imagen de una ciudad.

Glamcey Jonathan. Siglo XX arquitectura. Las estructuras que dieron forma al siglo. Lisma ediciones, S L. Madrid 2003.