
Queremos edificios sensuales. A la gente le gusta tocar y sentir

Su obra es un referente actual, tanto como proyecto como construcción.

La relación que establecen entre el edificio y su envolvente hace que la piel que envuelve el volumen deba definir al máximo el concepto del edificio.

Por ello, es fundamental entender la conexión entre la idea de proyecto y la solución constructiva en la obra.

Es un despacho suizo de arquitectos, integrado por Jacques Herzog y Pierre de Meuron que hoy tiene oficinas adscritas, en Londres, Madrid, Pekin y Nueva York.

Nacen en 1950 (el 19 de abril y el 8 de mayo respectivamente) en Basilea (Suiza).

Estudian Arquitectura en la Escuela Politécnica Federal (ETH) de Zurich y terminan en 1975.

1978 Abren un estudio de arquitectura Herzog & de Meuron en Basilea.

Otros socios del estudio son: Harry Gugger (1991), Christine Binswanger (1994), Robert Hösl (2004), Ascan Mergenthaler (2004) y Stefan Marbach (2006).
Una vez constituido el despacho, los proyectos no tardan en llegar como la Casa Azul, la Casa de Piedra o el Almacén Ricola, que parten de la construcción tradicional y los materiales cotidianos pero reinterpretándolos para que adquiieran un nuevo significado.

El resultado son edificios de aspecto minimalista en la que la novedad se manifestaba sobre todo en el exterior.


La búsqueda de la forma del edificio mediante el material empleado y del proceso constructivo, es una característica que les ha acompañado a lo largo de su trayectoria.

Esta concesión del resultado formal al material niegan, el componente meramente artistico de la arquitectura.

Los dos arquitectos suizos niegan la interpretación meramente estilística de la arquitectura.

El redescubrimiento de los materiales y sus capacidades expresivas desembocaba también, como señala Moneo, en una vuelta a los orígenes de la arquitectura, donde son los materiales quienes determinaban el resultado.


Ejemplo de esto son los proyectos de los almacenes Ricola, pero especialmente en las Bodegas Dominus de Napa Valley, California, (1995-97), el centro Polideportivo de Pfaflenholz en Basilea y con la que ha sido una de sus obras más emblemáticas y conocidas para el público en general, la Tate Modern en Londres donde transforma una antigua central eléctrica, situada en la margen sur del Támesis, fusionando elementos tradicionales con Art Déco y modernismo según la Enciclopedia Británica.















La arquitectura deportiva ocupa en los últimos años un lugar destacado en el estudio, el cual ha proyectado y ejecutado los estadios de St. Jakob en Basel, Alianz Arena, Múnich y el Estadio Nacional de Pekín de los Juegos Olímpicos 2008.










Como alumnos en Zúrich, y admiradores en un principio, de Aldo Rossi, Herzog y de Meuron estaban familiarizados con el lenguaje de formas simples y volúmenes puros de éste último.

Pero la arquitectura de Herzog y de Meuron poco tiene que ver con la de Rossi, cuyo interés por la expresividad del material era mucho menor que la de los suizos.

En ese sentido, es mucho más importante el interés por algunos de los más representativos artistas minimalistas como Donald Judd.
La síntesis del trabajo de ambos es la tradición combinada con la tecnología moderna y con creatividad hacia los retos arquitectónicos que se les plantean.

Destacan las bodegas Dominus en el valle de Napa (California), el revestimiento de cobre de la Signal Box, en Basilea para los ferrocarriles suizos, y las imágenes impresas en los paramentos de la biblioteca de la universidad de Eberswalde (Alemania).




Diseñan proyectos que van desde la pequeña escala, con numerosas viviendas y edificios residenciales, hasta la gran escala del diseño urbano, estadios, museos y fábricas.



Figuran entre los arquitectos más prestigiosos del mundo, y también entre los más laureados: el Pritzker en el año 2001, y en el 2006 les ha sido otorgada la medalla de oro de la RIBA (Royal Institute of British Architects), el Premio Imperial de Japón (2007).
Son profesores en la ETH de Zúrich y en Harvard.

