Hallan frente a Cuba unas ruinas submarinas de 6000 años

¿Una ciudad perdida más antigua que las pirámides, o una rareza geológica?

Un misterioso descubrimiento ha resurgido en redes sociales, reavivando el debate y la curiosidad en todo el mundo: la llamada ciudad perdida, que yace bajo las aguas de la costa cubana. Hace más de 20 años, este sitio submarino atrajo la atención de arqueólogos y científicos, pero desde entonces ha permanecido prácticamente inexplorado.

En 2001, un equipo de investigación canadiense informó del hallazgo de enormes estructuras de piedra en las profundidades del océano, lo que sugiere los restos de un antiguo centro urbano próspero. De confirmarse, el sitio podría tener más de 6.000 años de antigüedad, lo que lo hace unos 1.500 años más antiguo que las Pirámides de Giza. Pero hasta el día de hoy, el misterio sigue sin resolverse.

Según un informe de la BBC de la época, los investigadores —que formaban parte del grupo canadiense de exploración Advanced Digital Communications— estaban cartografiando el fondo marino cerca de Cuba con un sonar cuando detectaron lo que parecían ser estructuras de piedra organizadas simétricamente. Estas formaciones se asemejaban a calles de ciudad y a una distribución organizada, a diferencia de las formaciones rocosas aleatorias que se suelen ver en el lecho marino.

Intrigados, el equipo desplegó un robot submarino para capturar imágenes en primer plano. Según informó LadBible, las cámaras del robot revelaron enormes bloques lisos con apariencia de granito tallado que sobresalían del fondo marino a una profundidad de unos 650 metros (2133 pies). Estos bloques tallados con precisión suelen asociarse con capacidades arquitectónicas avanzadas.

Las evaluaciones preliminares sugirieron que las estructuras podrían datar de hace aproximadamente 6000 años. De ser exactos, esto las situaría mucho antes de la construcción de los monumentos más emblemáticos del Antiguo Egipto. En pocas palabras: los humanos de la época ya habrían sido capaces de construir estructuras sofisticadas mucho antes del auge de la civilización egipcia. Esta sola implicación requeriría un replanteamiento significativo de la historia humana temprana. Como señaló el equipo canadiense original, dicha construcción exigiría no solo habilidades avanzadas de ingeniería, sino también un nivel de organización social no típicamente asociado con esa época.

A pesar de su potencial importancia, los investigadores instaron a la cautela. En una entrevista con la BBC en 2001, enfatizaron:

 que si bien el sitio podría haber sido un gran centro urbano, sería totalmente irresponsable decir qué era antes de tener evidencia. El entusiasmo era palpable, pero también lo era el reconocimiento de que la ciencia exige pruebas rigurosas.

Esas pruebas han sido difíciles de obtener. Los intentos de revisitar y estudiar el sitio con mayor detalle se estancaron y, según múltiples informes, no se han realizado expediciones de seguimiento importantes desde aproximadamente el año 200.

 Manuel Iturralde, investigador principal del Museo de Historia Natural de Cuba, inspeccionó los datos disponibles y describió las formaciones como «extremadamente peculiares» en una entrevista con National Geographic. Admitió que le resultaba difícil explicarlas geológicamente, pero recordó al público que «la naturaleza es capaz de crear estructuras realmente inimaginables». Lo que a primera vista parece obra del hombre, advirtió, podría resultar ser una peculiaridad geológica.

La profundidad es otro factor que complica la situación. El sitio se encuentra aproximadamente a 650 metros bajo el nivel del mar. Para que las estructuras artificiales se hundan a tal profundidad, explicó Iturralde, tendrían que tener alrededor de 50.000 años de antigüedad, muy anterior a las civilizaciones avanzadas conocidas. Si bien el nivel del mar en el Caribe ha aumentado a lo largo de milenios, no ha subido lo suficiente en los últimos 6.000 años como para justificar esa profundidad.

Como era de esperar, el descubrimiento reavivó la especulación sobre la legendaria ciudad perdida de la Atlántida.

Una persona no identificada incluso afirmó que el sitio cubano podría marcar las ruinas de esa mítica metrópolis.

Pero, como señaló la BBC en su momento:

las afirmaciones extraordinarias requieren pruebas extraordinarias, y en arqueología, la fascinación pública no reemplaza a los datos contundentes. Por ahora, la llamada «ciudad submarina cubana sigue siendo un misterio tentador.

Si bien las imágenes y las lecturas del sonar apuntan a algo extraordinario, la falta de un estudio exhaustivo deja abierta la posibilidad de que las estructuras sean completamente naturales. Sin una exploración más profunda, el debate entre la geología y la arqueología continuará.

BBC News, 2001 — “Symmetrically organized stone structures” reported off Cuba’s coast.

LadBible — Underwater robot footage reveals “huge, smooth granite-like blocks.”

National Geographic — Statements from Manuel Iturralde, Natural History Museum of Cuba.

Publicado por ilabasmati

Licenciada en Bellas Artes, FilologÍa Hispánica y lIiteratura Inglesa.

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