Perú es una cuna de culturas fascinantes, y entre ellas destacan la cultura Wari y la cultura Chancay. Los Wari, que florecieron entre los años 600 y 1000 d.C., fueron una civilización poderosa y expansiva, considerada por muchos como el primer imperio andino. Su influencia se extendió por gran parte de los Andes centrales, y fueron maestros en la planificación urbana, la agricultura en terrazas y la producción textil. Su caída dio paso a nuevas sociedades regionales, entre ellas los Chancay.

Los Chancay surgieron en la costa central de Perú alrededor del año 1000 d.C., justo después del declive de los Wari, y se mantuvieron activos hasta la llegada de los incas en el siglo XV. Se destacaron por su habilidad en la cerámica, con figuras distintivas de cuchimilcos (ídolos sonrientes), y por sus textiles elaborados. Eran una sociedad con una organización política centralizada y una red comercial muy activa.

Y es precisamente de esta última cultura, la Chancay, de la que nos llega la noticia. Recientemente, mientras unos obreros trabajaban en la instalación de un gasoducto en Puente Piedra, al norte de Lima, hicieron un descubrimiento asombroso. Encontraron el cuerpo momificado de una mujer, y los primeros análisis de los expertos indican que tiene más de 1000 años de antigüedad.

La compañía de gas Calidda fue la encargada de informar sobre este importante hallazgo. Inmediatamente, las obras se detuvieron para permitir que los arqueólogos ampliaran la zona de excavación y recuperaran otros posibles artefactos. Ya se ha confirmado que la mujer pertenecía a la cultura Chancay, esa civilización prehispánica que prosperó en la costa central de Perú entre los años 1000 y 1470 d.C., justo antes de que el Imperio Inca se expandiera por su territorio y marcara su declive a fines del siglo XV.

Este tipo de hallazgos son vitales para entender mejor nuestras raíces y la complejidad de las sociedades que nos precedieron. ¡Es como si el pasado nos hablara directamente!
El País
